Este robot mide menos de 5 centímetros, pesa solo 259 miligramos y podría resultar útil para la recogida de datos ambientales o la exploración de espacios confinados.
Los ingenios voladores necesitan mucha energía y los primeros prototipos de la abeja robótica necesitaban fuentes de alimentación externas por cable.
El modelo actual utiliza células solares situadas en la parte de arriba del dispositivo para evitar interferencias con las alas, lo que le da su curioso aspecto. Además se ha duplicado el número de alas lo que le proporciona mas empuje y estabilidad.
De momento no tiene sistema de guía y se dirige hacia a la fuente de luz mas próxima. Este robot está siendo desarrollado por Harvard Microrobotics Lab